Friday, July 30, 2010

Una “dictadura”.



Una “dictadura” es, según la Real Academia de la Lengua, un gobierno que, invocando el interés publico, se ejerce fuera de las leyes constitutivas de un país.
Hay dictaduras de derechas y de izquierdas, nacionalistas o teocráticas (por ejemplo el islamismo) e incluso ideológicas.
Y aunque las dictaduras tienen sutiles diferencias entre ellas, por ejemplo: las de derechas te someten por salvar a la patria; las de izquierdas por salvar al pueblo; las nacionalistas por salvar el folclore, las esencias primigenias y la pureza de la raza; las teocráticas por salvar nuestra alma y liberar al mundo de infieles y no creyentes; y las ideológicas porque, simplemente, ellos saben mejor lo que le conviene al pueblo; al final todas convergen en el mismo punto, imponer a los demás, por la fuerza y a través del miedo, su ideología dogmatica de cómo, nuestro comportamiento, nuestra forma de pensar y nuestra vida debe ser. Y su única justificación, al menos la única que ellos necesitan, la que les otorga patente de corso para dar por buenas todas sus fechorías, es que, ellos saben mejor que los propios interesados, lo que al pueblo más le conviene, lo que el pueblo mas necesita y lo que el pueblo va a tener, y esto es, quiera o no quiera ése pueblo.
Y, si hay un punto en donde discrepo con RAE, es en lo de que tiene que ser un gobierno el que ejerza una dictadura.
En realidad, en este momento, el mundo en general y Europa en particular se están viendo sometidos a dos dictaduras que no se presentan en forma de gobiernos.
La islámica y la nacionalista. La primera se compone de masas de fanáticos que no reparan en medios ni en formas a la hora de imponer su voluntad. Y la segunda en grupos o etnias más o menos reducidos que bajo el lema de liberar y preservar la “singularidad” de sus pueblos, (una “singularidad” que, ellos creen siempre, es superior a la de los demás pueblos) reniegan de su verdadera nación en aras de confeccionarse ellos mismo otra nacioncita o estado a su gusto y hechura.
Y es ésta ultima la que venimos sufriendo los españoles, especialmente, aquéllos españoles que hemos tenido la “suerte” de nacer en una de esas regiones, con costumbres, folclore y lengua propias. Cataluña, Vascongadas y mi “pobre Galicia”. Y también las Baleares y Valencia, naturalmente, aunque estas con menos virulencia. ¿A qué va a ser que la lengua de las demás regiones de España no es propia?
Escribe Luis del Val: El nacionalismo es la nostalgia de la tribu. Cualquier nacionalismo no es otra cosa que un grito de socorro, un pánico a la responsabilidad individual que se envuelve en emociones, canciones y banderas, para tranquilizar su desconcierto y su turbación.
En la tribu, al menos, si no se salva, correrá la misma suerte que los otros miembros, y siempre es más fácil enfrentarse a los problemas compartidos que entender al Fondo Monetario Internacional.
Y esto va a más, porque el banderín de enganche es seductor, y entre ser un frustrado más, a pertenecer a una tribu diferente, o sea, "superior", los internacionalismos tienen muy poco que hacer. Vuelve la tribu y la pujanza de los reinos taifas para colmar los anhelos de quienes tienen miedo a la libertad.

Y la cosa es mucho más grave de lo que parece, pues aunque, sobre el estatuto de Cataluña, (un estatuto que nunca debió llegar a ser) el Tribunal Constitucional, parió una sentencia, donde tratando de contentar a los catalanes, solo podaba un poco algunos de los artículos, los nacionalistas catalanes no se dieron por satisfechos y esta ultima semana el indigente intelectual de la Moncloa, junto con ese analfabeto de Iznájar, que sirve de pretexto como presidente de la comunidad catalana, (cosas veredes) han tomado a España por su era particular y la van a disolver en pedacitos y eso va a ser la verdadera desgracia y ruina de todos nosotros.
Estos dos golfos están de acuerdo en que Cataluña es una nación y que España es un molesto problema que sólo puede solucionarse fragmentando su Historia y su territorio.
Para ellos las leyes no existen, y menos aún, los tribunales.
Además esto es lo mas progre.
Y, a otra cosa quizás no, pero a ser progre, moderno y marchoso, nadie del mundo mundial, va a ganarle a José Luis Rodríguez Zapatero.
Y por si alguien trata de buscar la salvación de este pobre país en otra parte, para el Partido Popular, no mirar. Pues estos, los del pepe, tratan de pasar sobre todo el asunto, de puntillas, no vaya alguien a molestarse y luego no los vote.
¿Cuándo irán a darse cuenta que aquéllos que abogan por desmembrar a España en pequeñas nacioncitas, nunca jamás de los jamases, van a votar al pepe?
¿Cuándo tendrán la valentía de decir alto y claro, que el pepe no cree en ninguna nación, ni nacionalidad, que no sea España y la española?
¿Cuándo serán capaces de gritar a los cuatro vientos que ellos no consideran a Cataluña, Galicia y la Vascongadas, nada más que partes de España? Y ni siquiera partes privilegiadas, como le oí decir el otro día a un contertulio de un programa de televisión, tratando quizás de suavizar su sentencia, sino partes igual que las demás. Regiones de España, punto.
Pero, me doy cuenta que pedir eso es de ilusos.
Los políticos españoles, salvo honradas excepciones, venderían su alma por un puñado de votos.
Lo que importa de momento es hacerse con el Gobierno. El país y su integridad, puede esperar.

Thursday, July 22, 2010

Y preguntarse todavía ¿Quién ha ganado el debate? es de imbéciles.





Ahí estaba nuestro ínclito presidente Zapatero, nuestro insigne líder, tratando de explicar a todos los españoles, de la forma mas bonita posible, el como se las arregla uno para convertir, en solo seis años, a la octava potencia económica mundial en los indigentes de Europa. Tratando de explicar como se coge un país con una economía “saneadísima” y en poquísimo tiempo tenerlo hecho unos zorros.
Y ahí estaban también el líder de la oposición y los “lidercitos” de las diferentes comunidades autonómicas para tratar de dejarlo en evidencia.
Aunque en realidad, lo que se dice tratar, tratar, no trató ninguno. De estos últimos cada cual fue a lo suyo. Duran y Lleida, al igual que Montilla, con lo del Estatuto de Cataluña. Izquierda Undida, con su letanía de siempre, que si hay que mirar por el obrero, que si la culpa de todo la tiene la derecha y el clero, Aznar, Franco, etc., vamos lo de siempre, machacona y cansina. El PNV, con un aviso para el Gobierno, si quiere nuestro apoyo, a pasar por caja, y así sucesivamente.
Y en cuanto al que se supone líder de la verdadera oposición, el señor Rajoy, pues tampoco parece que realmente tratase demasiado. Su respuesta fue tibia y sin muchas ganas y sus alternativas de Gobierno solvente brillaron por su ausencia.
O sea, que toda la parafernalia sobre el debate del Estado de la Nación, no pasó de una merienda de negros.
Pero lo mas chusco vino al día siguiente, cuando los periódicos de la nación se dividían opinando sobre quien había ganado el debate. ¿…?
O sea, ahí delante de nosotros teníamos al hombre que nos está llevando a la más absoluta ruina y frente a él a una oposición que no demuestra tener muchas más luces y lo que a nosotros mas nos preocupaba era: ¿Quién había ganado el debate?
O sea, ¿Cuál de aquellos dos fulanos era el más listo a la hora de replicarle al otro…?
…¡Vamos!, es que uno ya no sabe si cortarse las venas o dejárselas largas.
¿Pero en que país vivimos?
¿Pero es que todavía nos hace falta que alguien, a base de ingenio, nos demuestre lo que es Zapatero?
Zapatero es un fraude. El mayor fraude que nos ha tocado como “gobernante” desde Fernando VII, -que le compró una flota podrida a Rusia para quedarse con la comisión-. Un anti-midas. El rey Midas convertía en oro todo lo que tocaba y Zapatero convierte en ruina todo lo que toca.
Un fraude como el socialismo “progre” que nos quieren vender.
En realidad como todo el socialismo, pues nunca, en ningún país, esta forma de “gobierno” llegó a buen puerto.
Por lo tanto, a estas alturas de la película, tanto el debate del Estado de la Nación, como los que estaban allí, incluido Rajoy, deberían haber sobrado. Puesto que, a estas alturas, debiera de ser de sobras sabido, por todos los españoles, que el Estado de la Nación es, simplemente, una ruina.
Y preguntarse todavía ¿Quién ha ganado el debate? es de imbéciles.
El perdedor de ese debate ni fue Zapatero ni Rajoy. Ellos no van a tener problemas.
Los perdedores somos todos los españoles. Nosotros si las vamos a pasar canutas.
Y el no querer darse cuenta es hacer el bobo, y el que quiera cegarse y seguir haciendo el bobo, mientras discute quien es el perdedor o el ganador, allá él, pero a mí que me cuenten fuera.

Sunday, July 11, 2010

El sueño se ha cumplido....





El sueño se ha cumplido. Hemos ganado el Mundial de Futbol 2010.
Después de un partido de infarto en el que nos tocó lidiar, y nunca mejor dicho, a una correosa, dura y, por qué no decirlo, marrullera Holanda, un equipo que, si vamos por el futbol hoy desplegado en la final, no se merecía haber llegado hasta aquí, ya en la prorroga con los nervios deshechos y sin uñas, un magnífico gol de Iniesta nos convertía en campeones del mundo.
Y esta dicho que, cuanto más dura sea la batalla más grande será la gloria. Y la batalla fue muy dura, durísima y la gloria es inmensa.
La Bandera Española, para despecho de los nacionalistas-separatistas seguirá ondeando aun durante muchos días en un sinfín de lugares de España.
Aquí en Galicia, la chusma del “Nunca Mais” (¿Dónde andarán ahora estas ratas?) se retorcerán de rabia y odio allá en sus cubiles y ese pensamiento hace que mi alegría por esta victoria de hoy sea todavía más completa.
-Ya veis como al final no fue como vosotros querías chusma cobarde y dictadora.
Por cada uno de los horribles carteles negros que vosotros poníais en las ventanas, con la patética leyenda del “Nunca Mais”, hay ahora cinco banderas de España.
Espero que con esto sepáis entender el mensaje que Galicia y España entera os ha mandado.
Porque Galicia “Siempre con España”. Porque Galicia, mal que os pese, es y siempre será España. -
Pero ahora no es el momento para rencores. Es el memento del regocijo y la alegría.
Ya termino porque salgo para celebrarlo con los amigos. He esperado 57 años para hacerlo pero ha valido la pena.
Hay una canción que dice:
Si al grito de “Viva España/
Otro viva no responde/
Si es hombre no es español/
Y si es español no es hombre.
Nunca antes fue tan aplicable ese concepto.
Viva la Selección Española.
Viva España.
Somos campeones del mundo.

Monday, July 05, 2010

El sueño continua.






Acaba de finalizar el partido entre España y Paraguay, con el cual, con otro golazo de “Villa el Magnifico”, España, por primera vez, se gana un puesto para la semifinal del mundial de futbol 2010.
El sueño continua. Y de verdad que, lo que se está viviendo en España desde que comenzó este mundial, parece un sueño. Y es que, en toda mi vida, ni siquiera en vida de Franco, yo tenía 25 años cuando este murió, recuerdo haber visto tantas banderas de España ondear de tantos diferentes sitios. En los balcones, en las ventanas, en los tejados, en los coches, hasta colgadas de algunas de las grúas que coronan nuestros pueblos y ciudades, se pueden ver banderas de España ondear al viento.
España, un pueblo que parece que cada día que pasa, merced a un Gobierno que está resultando ser el mas nefasto que hemos tenido desde que Isabel y Fernando contrajeran matrimonio, merced a la voracidad de 17 autonomías con 17 presidentes y gobiernitos que con sus ansias de grandeza amenazan con fagocitarla, merced a un Tribunal Constitucional que en vez de velar por que se acate la constitución, por no agraviar a Cataluña la insaciable, hace un apaño sobre su “Estatut”, que termina siendo un despropósito tan grande, que mas parece obra de Pepe Gotera y Otilio, que de un tribunal que, con sus togas y puñetas, tiene como misión velar por la Constitución de un país, merced a las barbaridades que cada día vemos perpetrar a nuestra justicia y nuestros mandatarios, como multar a un canal de televisión con 100.000 euros por un “spot publicitario” que dice que estamos orgullosos de ser heterosexuales o pasar una ley en Cataluña que amenaza con multar con hasta un millón de euros a todo aquel comerciante que no atienda a sus clientes en catalán, sin que nadie diga nada, merced a todo esto, repito, pierde su nombre como nación y toda su razón de ser. Y de pronto, y gracias a un torneo de futbol, resurge de sus cenizas y se echa a la calle con un entusiasmo y un patriotismo que no se recordaban desde aquel glorioso “2 de mayo de 1808” en que se levantaron contra el gabacho y se los pusieron de corbata.
El próximo miércoles día 7 volvemos a jugar contra Alemania y, posiblemente, nos elimine, o no. Sea como fuere eso será el miércoles. Mientras tanto la “Bandera de España” seguirá ondeando todavía en más sitios diferentes y en alguna parte los nacionalistas-separatistas seguirán escondidos debajo de alguna piedra, posiblemente que descanse en alguna maloliente cloaca, comiéndose las entrañas. Solo por esto ya me han hecho el año. Así que, mientras llega el miércoles: viva Villa, viva la “roja” y Viva España.
Dios os bendiga.