Monday, May 23, 2011

Indignados si, pero sin romper la televisión.





Toda la semana han tratado de convencerme y hasta yo he tratado de auto convencerme de que los “Indignados” o “Democracia Real” o como demonios se autodenominen, no van en contra de ningún partido o ideología, sino que son una masa heterogénea de gente que se ha hartado de las casta política que nos rodea y piden un cambio.
Pero al final, al poco que uno se fije, enseguida se da cuenta que nada de nada, es la misma excoria progre de siempre. Imbéciles niños de papa, muchos no tan niños, que sienten nostalgia de aquella “batallita” del mayo del 68 y que, además, viendo que tanto sus ideologías como sus queridos partidos de izquierdas están defenestrados se salen por peteneras y nos sueltan este rollo de la democracia real.
Y esto queda palmario al poco que se le pregunten por sus reivindicaciones, no dicen nada, o, como mucho, uno o dos puntos con sentido y que caen de cajón y cinco o seis chorradas, utopías, le llama la televisión. Si se les preguntan que es lo que tiene que ocurrir para que se den por satisfechos y se vayan a sus casas, tampoco dicen nada y es que no lo saben. Bueno, los que dirigen la cosa, Willy Toledo y company, si lo saben. Si en las elecciones de mañana el PSOE y la izquierda no sufren la debacle que se pronostica, posiblemente se den por satisfechos y la cosa se disuelva poco a poco; pero si es al contrario y el PP gana con abrumadora mayoría, tanto que haga que Zapatero tenga que adelantar elecciones, entonces siguiran ahí, hasta que la cosa se salga de madre, empiecen a asaltar sedes del PP y centros de television de la derecha y luego dios sabe donde acabara.
Alguien a quien yo quiero mucho me dijo hoy: vienes protestando contra el sistema político que nos ha tacado en suerte y ahora que estos hacen lo mismo no te gusta.
Y es verdad que he perdido la cuenta de las veces que dije que la democracia que se vivía en España dejaba mucho que desear.
Es verdad que yo creo en cosas como que: El presidente del Gobierno de España debe de ser elegido por el sufragio universal de todos los españoles y no a través del Parlamento que controlan los aparatos de los partidos.
Que urge la reforma de “ley electoral” para favorecer las listas abiertas, con circunscripciones y ajustes proporcionales para “los restos” de los votos nacionales.
Que los órganos gestores del Poder Judicial deben ser elegidos por los cuerpos jurídicos del Estado y no por el Gobierno y Parlamento.
Que hay que reformar las malditas Autonomías, y quitarles todas aquellas competencias, como educación, policía, sanidad, gestión de impuestos, etc., que deben ser competencia del estado. Convertirlas en gestoras de cada atonomia o región y despojarlas de esa línea de "mini estaditos", verdaderas tragaderas del erario público, o, en su caso, hacerlas desaparecer y sustituirlas por gobernadores civiles o algo así, que den cuentas al Estado Central.
Que la lengua castellana (española) deba ser obligatoria e ineludible en la vida pública y especialmente Enseñanza, Administración, y la Justicia. Y que el Estado debe promocionar en el mundo global, a través de Internet, la cultura y el idioma español.
Y es verdad que en algunas de estas coincido con ellos, pero pienso que esto hay que arreglarlo con la palabra y no con revoluciones y caceroladas.
Conocí hace tiempo un matrimonio que cada vez que reñían, y lo hacían a menudo, él, para demostrar lo machito que era, rompía la televisión y al día siguiente después de hacer las paces, se iban a comprar otra, así una vez tras otra. Cuando ya iban por la televisión numero ciento cincuenta o algo así, ella se hartó y lo abandonó.
Y es que, el tío este podría haber tenido una discusión con su mujer, como tenemos todos y resolverla mas o menos bien, pero sin romper la televisión, porque de esta manera, el que le vendía las televisiones se estaba haciendo rico, pero él se esta arruinando.
Y en este caso es lo mismo, nuestra casta política apesta y hay que limpiarla, pero sin romper la televisión..

Monday, May 16, 2011

Fue cazado en su lujosa guarida.




Fue cazado en su lujosa guarida.
Así comienza la noticia sobre la muerte de Osama Ben Laden, y sigue: ahora so cadáver alimenta a los peces, la justicia ha alcanzado al carnicero responsable de la muerte de miles de personas inocentes.
Bien, no sé cuánto de esto es verdad, por lo pronto lo de la “lujosa guarida” hay que descartarlo, puesto que, y juzgando por las fotos que aparecen en los medios, la casa donde residía Osama, no pasaba de ser una especie de fortín, lleno de humedades y cochambroso a más no poder.
Y en cuanto a lo de que su cadáver alimenta a los peces, déjenme que lo dude. Me apuesto mi colección del Capitán Trueno, a que, dentro de unos años, el cadáver vuelve a aparecer por cualquier sitio y sino al tiempo. Buenos son los americanos por guardar trofeos.
Lo que sí parece que no deja lugar a dudas es que al fulano le han dado matarile y del bueno.
Y en verdad se lo merecía. El tío era un fanático recalcitrante. Heredó una fortuna de su padre, pudo vivir una vida regalada y, si le apetecía, ayudar a su pueblo, y al mismo tiempo predicar su religión y tratar de convencer al mayor número de personas posible de que esa religión y forma de vida era la mejor para alcanzar el paraíso o lo que fuere y el que se lo comprase, pues adelante y el que no, que siga su camino y tan amigos y de esta forma podría vivir tranquilo y morir en paz e incluso pasar a la historia como un gran hombre.
Pero como el fanático que era, eligió imponer su religión y sus ideas por la fuerza. Igual que hacen todos aquellos que nos tratan de imponer sus ideas a sangre y fuego, -Y digo, “nos”, porque aquí en España también estamos sufriendo algo similar con los nacionalistas-
Y, como dice aquél, vivió con la espada y murió con la espada.
Se metió con Estados Unidos y los americanos se la tenían jurada, y a estos se les puede culpar de muchas cosas, pero no, de no ser eficaces y expeditivos en su trabajos.
-Con estos me justaría ver a los pistoleros de la E.T.A. iban a durar menos que un biscocho a la puerta de un colegio. Y a los del “bildu” ese, pidiendo entrar en las listas electorales, la primera patada que iban a recibir en sálvese la parte, les iba a enseñar que con un país serio no se juega-.
Y este debería ser el final, pero no. Como era de esperar ya han surgido las plañideras de siempre, esos “buenistas” que tanto temen que se despoje de sus derechos a los malhechores.
-A menos que ese malhechor sea de “derechas” tipo Pinochet o algo así, entonces ni escatiman en medios a la hora de acabar con él, ni les importa un rábano la manera en que se haga-.
Pero volviendo a la nuestro:
Cuando alguien te priva de la vida, te priva de todo derecho, pues más allá de la vida no hay nada, ni derecho ni torcido.
Cuando ese alguien es además un terrorista asesino que ataca, mata y se esconde, se convierte en una fiera, luego tiene que ser cazado como una fiera y no puede aspirar a que se le den derechos de ser humano.
Lo primero que pusieron por delante para mostrar su descontento estos “bienhechores”, fue el hecho de que, según ellos, esto dará lugar a una gran represalia por parte de los terroristas islámicos.
Pues yo no me lo creo asi.
En realidad el peligro del islamismo radical esta siempre latente sobre nosotros y, cuando menos lo esperemos, puede venir uno de estos fanáticos con ganas de ganarse el paraíso y las “hurís” que tampoco son moco de pavo y mandarnos a todos a hacerle compañía a Bin Laden.
Pero hay algunos de estos islamistas que maldito el deseo que tienen de irse todavía con Ala, y estos son sus líderes. Los lideres islamistas gustan mucho de predicar lo bonito que es el morir por Ala, el martirio por la fe y tal y tal, pero que lo hagan sus fieles, mientras ellos tratan por todos los medios de retrasar ese momento el mayor tiempo posible.
Y son estos líderes, los que ahora con la muerte de Bien Laden y además viendo la forma en que murió, se lo pensaran dos veces donde y a quien les ponen sus bombitas.

Bloody Mary.



Un amigo mío se ha enterado por casualidad que el coctel conocido como “bloody mary” le debe su nombre a una reina inglesa. Y, como sabe mi gran afición por la historia, enseguida ha venido a preguntarme quien había sido esta reina y el por qué del nombre.
Bien pues esto va dedicado a él y a quien quiera que lea esta blog.
“Bloody Mary”, es el nombre que los ingleses le dieron a María Tudor, la Reina María.
María I, fue reina de Inglaterra desde 1553 hasta 1558, año de su muerte. Y estuvo casada con el rey de España Felipe II.
María Tudor era hija del rey ingles Enrique VIII (Henry the VIII) y la española Catalina de Aragón.
Esta Catalina era hija de los Reyes Católicos, hermana de Juana la Loca y, por tanto, tía de Carlos I o Carlos V, como se prefiera, puesto que era primero en la corona de España y V en la de Alemania, y, a su vez, este Carlos V, fue el padre de Felipe II y por tanto Felipe y María eran… Bueno me he perdido un poco y no sé muy bien lo que eran, el que quiera que eche cuentas y lo averigüe.
-Catalina antes de con Enrique, estuvo casada con su hermano mayor Arturo, Príncipe de Gales y, como ya se sabe, los hermanos pequeños siempre quieren lo que tienen los mayores, a la muerte de Arturo, Enrique se casó con ella-
Aunque, en realidad, si a alguien le parece mucho embrollo el casamiento entre Felipe y María, no quiero verle quitando cuentas sobre el árbol genealógico de las actuales casas reales europeas. Ese sí que es un embrollo de los buenos, sus ramas se cruzan una y otra vez por arriba, por abajo, por el medio. Bueno es imposible saber cuántas veces nuestro Rey Juan Carlos se emparienta con, por ejemplo, Isabel II de Inglaterra…buuff, no quieran saberlo.
Menos mal que, con la nueva tendencia de los herederos de las diferentes coronas europeas de casarse con plebeyas, se está inyectando sangre nueva a la cosa, porque se estaban quedando tontos tú.
Pero volviendo a lo nuestro. María llegó al trono tras un breve reinado de su hermanastro Eduardo VI. Aunque, en realidad, no fue exactamente tan así.
Eduardo VI era hijo de Enrique octavo y su tercera esposa Jane Seymour, y por tanto hermano menor de María, y heredó el trono de Inglaterra a la edad de tan solo 10 años, era un niño enfermizo y a causa de esa mala salud, murió con solo 19 años.
Eduardo sentía una gran animadversión hacia María, algo en lo que coincidía con uno de sus principales protectores, John Dudley, duque de Northumberland, este, viendo el rápido deterioro de la salud del joven monarca, le persuadió para que hiciese un testamento que desplazase a las hermanas de Eduardo, María e Isabel, (Mas tarde Isabel I) de la línea sucesoria, y la corona pasase en cambio a una prima de estas, Lady Jane Grey, (Juana Grey) de solo 15 años, que estaba casada, casualmente, con el hijo de Northumberland.
Este último detalle supongo que sería una casualidad. No creo que el hecho de que Jane Grey fuese su nuera, influyese en el ánimo del bueno de Northumberland a la hora persuadir a Eduardo para que nombrase a ésta reina.
-Esta Jane Grey era, además, hija de otra María Tudor, la hermana de Enrique VIII-
Fuese como fuere, estos tejemanejes entre Northumberland y Eduardo, no fueron bien acogidos por el pueblo, entre el cual empezó a generarse un descontento general.
Esto fue aprovechado por María la cual, seguida de veinte mil partidarios armados, y con su hermana Isabel a su lado, entro en Londres, donde fue proclamada Reina.
Northumberland fue apresado y la pobre Juana (Jane) Grey, mas victima de las circunstancias que otra cosa, fue decapitada.
Debido a esto, Jane Grey, es conocida como: la Reina de los Nueve Días.
Pero Jane Grey, no fue la única protestante en ser ejecutada, en realidad, dice la historia, cientos de personas fueron condenadas a la hoguera. En realidad en esto, la historia o mejor dicho los historiadores, especialmente los ingleses, los cuales no siente una gran simpatía hacia la figura de María, exageran, puesto que al final la gente que murió por orden o a causa de las ordenanzas de María, debió andar por alrededor de los 300, y, si tenemos en cuenta los grandes criminales de la historia tipo Hitler, Stalin, o Pol Pot, María no pasó de ser una simple aficionada.
Y, además, no creo que María debiera de haber sido juzgada de forma tan severa, sin tener en cuenta ni poner en contesto el tiempo en que ella vivió. En su fuero interno la infeliz María trataba de proteger a Inglaterra, y a los hijos de la Gran Bretaña de las diabólicas, o por lo menos así ella lo creía, influencias del protestantismo.
Claro que el hecho de ser condenado a la hoguera y especialmente en un lugar como Inglaterra donde, a causa de la humedad la leña arde tan mal, no es algo que deba entusiasmar a nadie.

De todas formas y sin darse cuenta, actuando de la forma en que actuó, María hizo más por el avance del protestantismo que ningún protestante pudo jamás imaginar.
María solo gobernó en el trono ingles durante cinco años, al final de los cuales murió de un cáncer de estomago, y sin haber tenido hijos, en 1558.
Después de su muerte Inglaterra se convirtió por completo al protestantismo, no sabemos que hubiese pasado de haber vivido más tiempo.
Su leyenda le dio nombre a un coctel de vodka con zumo de tomate, así que, no pudo haber sido tan mala.