Tonterías, chorradas y pan tumaca
Hoy quiero resaltar algunas de las tonterías y chorradas que he leído por ahí.
Son solo una pequeña muestra, pues dada la envergadura de la capacidad que tiene este país de generar chorradas y tonterías, hace imposible que ningún ser humano sea capaz de sintetizarlas todas, aunque dedicara a ello las 24 hora del día.
Leo en un periódico regional, de aquí de Galicia, un artículo escrito por Cesar Casal, que él titula, “Robo de hora y luz”.
Y en el expone que, a su parecer, el cambio de hora que venimos experimentando todos los años, de cara el invierno, es el robo de luz más descarado. Un atraco, según él, pues en España, no aprovechamos más la luz escasa del alba y nos quedamos totalmente a oscuras tras el café de la tarde, haciendo que gastemos una fortuna en antidepresivos y ansiolíticos.
Hasta aquí estoy completísimamente de acuerdo con don Cesar, y lo estaría sin más si no fuera por el hecho de que en su artículo añade que, este robo es todavía más sangrante en Galicia, donde teníamos que compartir hora con Inglaterra, Portugal y Canarias.
Y aquí es donde don Cesar patina, pues de tener Galicia la hora de Inglaterra, Portugal y Canarias, la noche todavía se nos vendría encima a una hora más temprana.
Para que se me entienda: ahora mismo, tal y como está la hora en Galicia, anochece alrededor de las seis. Si tuviésemos la hora de Portugal, Inglaterra y Canarias, anochecería alrededor de las cinco, o sea una hora antes.
Por cierto, en Inglaterra, país en el que viví durante 17 años, el día de Navidad, por nombrar el más notable, anochece a las cuatro y media de la tarde.
La siguiente tontería es esa de que, de ahora en adelante, los apellidos de los hijos ya no tendrán que ir, forzosamente, primero el del padre seguido del de la madre, sino en el orden en que ambos padres deseen y en el caso de que hubiese divergencia entre estos y no llegasen a un acuerde, este orden se definiría por orden alfabético.
Ge, ge, ¡que idiotez más grande Dios mío! Y todo esto a cuento de la igualdad de sexos o géneros o yo que sé.
Pues en muchos países, incluida mi querida y añorada Inglaterra, no solo no va el apellido de la madre primero, sino que, este desaparece y el hijo solo hereda el de padre y no solo eso sino que la mujer, a la hora de contraer matrimonio, pierde su apellido de soltera y adopta el apellido del marido y allí nadie se siente discriminada por ese hecho, muy al contrario, la mujer se siente my orgullosa al hacerlo.
Y, además, si aquí estamos haciendo esto por la igualdad, estamos siendo muy injustos, pues lo que creamos en realidad es una desigualdad más grande.
Y me explico: cuando una pareja tiene un hijo, la mujer sabe a ciencia cierta que ese niño es suyo, Los hombres, en cambio, tenemos que aceptar a ciegas y en un acto de fe monumental que ese niño es, realmente, nuestro hijo y lo hacemos, pero nunca podremos estar seguros al cien por cien. Lo único que teníamos, hasta ahora, era que, por lo menos, ese niño llevara nuestros apellidos, ahora ni eso. Después de esta ley tan injusta, ¿que nos queda a los hombres?
La siguiente es una chorrada con mayúsculas.
Al parecer unos “talibanes” hispánicos quieren dinamitar la Cruz del Valle de los Caídos, porque les recuerda a Franco.
De seguir este método los “Cristianos”, cuando volvieron a reconquistar España, expulsando de ella a los moros, hoy no podrimos contemplar maravillas tales como, la Giralda de Sevilla, ni la Torre del Oro, ni la Alhambra de Granada, ni la Mezquita de Córdoba.
Y, para más “inri”, estos paladines de la “Memoria Histórica” talibanesca, se consideran a sí mismos progresistas.
En realidad, Franco, demostró tener más agallas y más sentido de respeto por los muertos que ellos, pues aquél enterró en el “Valle”, los cadáveres de los caídos en ambos bandos cosa que, de darse la misma situación pero a la inversa, ellos nunca harían.
Pero la verdadera tontería. La idiotez con mayúsculas se da en Cataluña.
El mundo se derrumba a su alrededor y ellos ni se enteran, dándole vueltas a quien van a votar para ser el nuevo presidente de su…”país” y votándose unos a otros, o sea votando solo a partidos nacionalistas, sean estos de derechas o de izquierdas.
El mundo tratando de ver como mejor poder salir de la madre de todas las crisis y ellos creyéndose el ombligo del mundo. Viviendo ajenos a todo, metidos en su concha. Sintiéndose habitantes de una arcadia feliz donde las penalidades, el hambre y la miseria del resto del mundo parece no fuera con ellos.
El mundo muriéndose de hambre, víctima de una crisis que afecta de norte a sur y de este a oeste del globo sin excluir a nadie y ellos exigiendo que en sus hoteles se sirva “pan con tomate”.
Algo así como si el edificio donde se encuentra el piso en que vivimos se estuviese derrumbando y nosotros nos preocupásemos de cual seria el mejor papel para las paredes de nuestro salón
¿Se puede ser más iluso?
¿Es que no se dan cuenta de que aquel dicho que dice que el mundo es un pañuelo, nunca fue más cierto?
¿Qué hace falta para que se enteren de que las “naciones” no son más que ínfimos puntos en la inmensidad del universo?
¿Qué se necesita para que estos chauvinistas se abran a la idea de que en la era en que vivimos el mundo se ha convertido en un lugar infinitamente pequeño que cada día mengua todavía más y donde la palabra nación está perdiendo toda razón de ser?
Cuando lo que realmente se necesita es estar unidos, ellos siguen con la murga de separarse.
Y así, entre tontería y tontería hemos vuelto a estar otra vez donde estábamos.
Otra vez pudo haber funcionado la cosa.
Otra vez España, pudo haber sido una democracia.
Pero toda esta gentuza del pan tumaca, de las miembras y las jovenas, de la “memoria histórica” e histérica si no es políticamente correcta y ajustada a su idea, y de la democracia sí pero solo si ganan los nacionalismos de aldea y la izquierda, lo han mandado todo al carajo otra vez.
Lo decía Groucho Marx Empezamos de la nada y hemos llegado a la más absoluta miseria.